16/9/07

Luz de vida

Guía de mis pasos sobre la tierra

y el sendero seguro entre las sombras,

¡Cuánto resplandor evocan las ondas

que se integran entre la brisa fresca!


Gracias a ti todas las maravillas

se reflejan sobre mi absorta mirada,

y cuando nos muestras la candorosa mañana

¡Sí que me siento tan lleno de vida!


Y es que sólo tú eres capaz

de revelar la belleza del inmenso cielo,

así como viajas por el universo

junto al resplandor de un estrella fugáz.


Pintas mi existencia de color

y retocas de vitalidad cada lugar,

si hasta cuando pasas sin avisar

las criaturas bailan al ritmo del corazón.


Eres la melodía que suena sin parar,

como las notas de un inigualable cantar;

la sensación de la energía de la luz solar

que presurosa y cálida nos viene a saludar.

9/9/07

Por qué se va tan rápido el tiempo!!!

El tiempo pasa ante nuestros ojos

va muy rápido y no vuelve jamás,

como los granos de arena que entre los dedos

se nos escapan… sin poderlo evitar.


Soy su víctima cuando en las mañanas

presuroso salgo a estudiar o trabajar,

mientras el tiempo siempre se adelanta

y tarde, nuevamente, termino por llegar.


Cuando tengo prisa el mundo pareciera paralizado;

cuando necesito tiempo, va corriendo, va corriendo;

sólo sé que el efecto siempre es contrario

para que tenga que salir perdiendo.


El viento sopla tan rápido como puede

y las velas del barco luchan contra él,

yo me siento las velas que luchan contra la vida

tanto como el tiempo se resiste a perder


No sé si el tiempo sea una divinidad,

no sé si existe al menos una posibilidad

de modificar el rumbo de las cosas

para el beneficio de todas las personas.

1/9/07

En defensa de la naturaleza

Bajo las sombras de los sauces,

donde descansan las praderas

y revolotean todas las aves…

¡eh ahí! El Paraíso de las Camelias.


Cuando brilla el sol sobre los montes

y el río pasando está a través de los bosques,

los animales juegan, se abren las flores

y el aroma se confunde con sus colores.


Bendito lugar en que perenne está la alegría

y puedes respirar libertad todos los días.

Así como las nubes vuelan en el cielo

y las estrellas brillan en todo el universo.


Tanta bondad alberga el lugar

que de sólo pisarlo vas a soñar,

que has llegado al sitio ideal

donde poder vivir y descansar.


Pero hay algo que anda mal…

¡El Paraíso de las Camelias no existe más!

Alguien entró y sin permiso abusó

de las maravillas que se le ofreció.


Su nombre es HOMBRE y no sabe pensar:

destruye lo que le rodea, aunque sea vital

para él y para todos los demás…

¡Cómo es posible que sea racional!


En fin, pronto el día llegará

en que su ambición lo hará estallar;

y sólo, frente al destino, acabará…

¡Sus días contados ya están!


El tiempo raudo ha de pasar

y entonces el Paraíso volverá a renacer,

y bajo el suelo el hombre existirá

y perderá el don de su gran poder.


Volverá, para todos, la alegría;

habitará entre nosotros el amor;

cuyo aroma recuerda la fantasía

del aquel entonces: “mundo mejor”.


Y entonces los pajarillos cantarán,

las aves volverán a revolotear,

las praderas verdes descansarán

y bajo el sauce reinará la paz.